En enero del 2014, empecé mi camino en ThoughtWorks. Antes de eso, era una periodista que nunca disfrutó de la technología. Sin embargo, cuando trabajé como redactora para una revista de tecnología, me dejé absorber por ese mundo. Mi interés en el Desarrollo de Software nació tras escuchar una charla de Rebecca Parsons; fue una gran inspiración. Entonces, empecé a estudiar sobre tecnología y específicamente sobre programación a través de recursos en línea. Pero a la final, ThoughtWorks ha sido mi escuela.
Mucho ha sucedido durante mi primer año aquí y tuve que aprender todo desde el inicio. Fui a TWU, fui parte de mi primer proyecto de Desarrollo de Software, me involucré en Iniciativas Sociales, apoyé eventos tecnológicos entre otras cosas. Nueve meses en ThoughtWorks no parecen mucho pero cuando tratas de capturar todo en lo que has participado, parece que ha sido mucho más. Y eso fue exactamente lo que necesitaba hacer - capturar todo para compartirlo en el ejercicio de revisión de desarrollo.
Empecé a armar una presentación, pero después de 30 diapositivas me di cuenta que estaba fallando completamente de llegar al punto que trataba de mostrar y comunicar lo que quería. Un compañero me sugirió hablar sobre mi trayectoria como si contara una historia. Había pasado 4 años en periodismo y me había familiarizado con la sencillez de una narración. Decidí usar la metodología de las 5W’s para empezar a construir mi historia.
Usando las 5 preguntas básicas (quién, qué, dónde, cuándo, dónde y por qué) pude armar mi historia sin irme por las ramas. Me enfoqué principalmente en mi desarrollo, crecimiento y mi participación en la empresa, así como en el desarrollo de otros en la compañía. Y pude dar suficiente contexto. Adicionalmente a las 5Ws, incluí un cómo a mi historia, lo que la hizo mucho más comprensible.
De la forma típica de Thoughtworks, hice una lluvia de ideas (con post-its y sharpies) y aterricé en mi historia. Quiero compartirles algunos tips de mi camino de desarrollo y aprendizaje continuo.
1. El Feedback es tu tesoro:
Si quieres saber qué es lo que hiciste bien y medir tu desarrollo, el feedback es una parte integral de el. Fue en este punto en que me di cuenta de la importancia de colectarlo y tenerlo documentado. En ThoughtWorks, muchos de nosotros tenemos una persona que toma el role de Coach, Mentor o Sponsor. Juntas con mi Sponsor, creamos una forma de colectar y documentar mi feedback. Nada del otro mundo: una hoja de cálculo en Google Drive. Tenerlo todo documentado, ayudó para que pudiera definir si estaba consiguiendo mis objetivos e identificar las áreas en las que debía enfocarme. Me ayudó a reconocer debilidades, fortalezar y establecer los siguientes pasos.
2. Priorizar es clave
Tenía todas mis ideas en la cabeza cuando empecé a armar las diapositivas, el problema era que no tenía definidos mis objetivos, entonces me di cuenta que el primer paso era priorizar. Tengo que reconocer que fue lo más difícil, saber qué era lo más importante y enfocarme en objetivos pequeños y medibles. En ThoughtWorks, es muy importante balancear tus objetivos entre los tres pilares. Algo que me ayudó mucho fue definir dónde me veía a mi misma en el futuro. La imagen completa me permitió empezar a romper en objetivos más pequeños y acciones más específicas que podrían ayudarme a trazar el camino para alcanzar esos objetivos más grandes.
3. Trazar tu hoja de ruta
Mi coach sugirió que dibujara todos mis objetivos en una línea de tiempo. Esto me permitió balancear lo que era más importante dado el tiempo que tenía para dedicarle a cada actividad. Primero, tracé donde creía que yo estaba y a dónde quería llegar. Usé un método de medición similar a la escala de Dreyfus para ayudarme a medir mis habilidades y conocimientos en una aptitud específica. Una vez hecho esto, dibujé mi camino a través de 5 áreas específicas en las que quería enfocarme: personal, profesional, aprendizaje, cambio social y entrega del proyecto. Con esto, pude balancear las actividades y abarcar todas las áreas, dándole más importancia a aquellas que creía necesitaba mejorar sin dejar de hacer otras.
4. Enfoque orientado a acciones
Si has hecho una restrospectiva antes, entenderás que la clave es establecer puntos de acción para aquello que necesita una mejora. Identifiqué esos elementos entonces pude medirlos y mantener un seguimiento de mi progreso. Mi priorizar más alta era leer libros, haciéndolo con el propósito de lograr progresivamente mis metas. Entonces, empecé a darle seguimiento a mi progreso con los libros que leía. Sólo podía tener 4 libros priorizados, los cuáles eran variables basados en mis objetivos y los requerimientos actuales. Este seguimiento incluía los libros en progreso y los libros que había leído. Además, incluí una lista de libros que podrían ser útiles en el futuro.
5. Plan a largo plazo
Todos somos concientes de que los planes cambian de un día a otro. Pero, es importante endocarnos en lo que queremos lograr y mantenerlo en el radar aunque no esté en el horizonte inmediato. Identifiqué mis objetivos a largo plazo de manera que tuviera una visión general en mente. Extendí la línea del tiempo y pospuse algunos planes solo para recordarme que, en algún punto, quiero alcanzarlos. Además, creo que es muy útil como un punto de partida para desarrollos futuros y para la siguiente revisión.
Estos cinco puntos me ayudaron a contar mi historia en 15 minutos y lo más importante, me ayudaron a establecer mis objetivos para un fuutro inmediato. Como recomendación final, creo que uno de los puntos más importantes dentro de mi experiencia es: asegurarse de que la historia de tu trayecto refleje quién eres y que tenga tu marca personal. Esto fue a mi manera y tiene mucho de lo que soy y lo que quiero llegar a ser. ¡Les deseo un camino valioso y productivo!
Este blog fue publicado en inglés por primera vez en Insights el 5 de febrero de 2015.